La Organización Mundial y la Panamericana de la Salud, además de la cartera sanitaria nacional, tomaron a la provincia porque las autoridades trabajan “de manera más seria y brinda información más fidedigna y transparente”, aseguró Cappiello. En tres semanas estaría listo el primer análisis.
Ver más en http://www.rosario3.com/noticias/noticias.aspx?idNot=53958
2 comentarios:
No hay dudas de eso. Algunos tratan de enturbiar las aguas con pequeñeces, pero la nueva gestion provincial tiene claro que hay que gobernar con responsabilidad y lo esta llevando a cabo.
http://www.lacapital.com.ar/ed_impresa/2009/7/edicion_275/contenidos/noticia_5045.html
El pasado domingo 12 de julio, se publicó una carta muy triste pero real. "A Nelson no lo mató la gripe A", dice el título, sino la pobreza y el no saber. Yo estuve con gripe A y gracias a tener un familiar médico pude hacer rápidamente los trámites ya que estaba asesorada, después de 48 horas de elevada temperatura se hizo un protocolo y debí ir al Cemar a retirar el antiviral. Concurrí y al darme el número (había 45 personas antes) me dijeron que esperara afuera. Eran las 14 y más o menos estuve bien hasta que se hicieron las 17 y el frío empezó a calarme los huesos. Entré a las 17.30 y todo era un caos, la gente necesitaba que se le atendiera pero dejaron de dar el número a las 16 y de atender a las 18, cosa que no se entendía por la gravedad de la situación. Cuando entré la doctora en una mano tenía mi protocolo y con la otra buscaba el antiviral. Yo no tuve explicación de cómo debía tomarlo pero mi turno había terminado y debí irme sin dejar de escuchar las quejas de las médicas que sólo tenían un contrato de seis horas y debían irse. Por otro lado, la gente que necesitaba la droga no tenía quién pudiese dársela. Me fui con la tristeza de darme cuenta que cada vez nos faltan más el respeto, que la indiferencia es la madre de las situaciones, que la desidia reina en todos los órdenes y de la desorganización ni hablar. Qué mal que nos tratan a los argentinos. Y muy ilusamente pensé que con los impuestos que yo pago religiosamente lo menos que podía recibir era la droga en mi casa, así de esa forma no expandiríamos la enfermedad. A Nelson no lo mató la gripe A, lo mató la falta de información de quienes están al mando de dar soluciones y haber omitido que después de 48 horas debía tomar un antiviral. Perdónalos, no saben, no quieren o no pueden hacer las cosas mejor.
Martha Chimento
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